Las encías retraídas pueden causar sensibilidad y pérdida de soporte dental. Descubre sus principales causas y las soluciones más efectivas.
¿Notas que tus dientes parecen más largos o que tienes mayor sensibilidad al frío y al calor? Es posible que sufras de encías retraídas, un problema muy común que afecta tanto a la salud como a la estética de la sonrisa.
Aunque al principio puede parecer solo un tema estético, las encías retraídas son un signo de que existe un desequilibrio en la salud periodontal. Si no se tratan, pueden derivar en complicaciones mayores como caries radicular, movilidad dental e incluso pérdida de piezas dentales.
En este artículo descubrirás qué son las encías retraídas, por qué ocurren y cuáles son las soluciones más efectivas para tratarlas y prevenirlas.
Las encías retraídas se producen cuando el margen de la encía se desplaza hacia abajo (en los dientes superiores) o hacia arriba (en los inferiores), dejando expuesta parte de la raíz del diente.
Las encías pueden retraerse por múltiples factores:
La gingivitis y periodontitis destruyen los tejidos de soporte, provocando pérdida de encía y hueso.
Usar demasiada fuerza, técnicas incorrectas o cepillos de cerdas duras puede desgastar la encía y el esmalte cervical.
Dientes que están inclinados o fuera de la arcada pueden tener menos soporte gingival y sufrir retracción.
Rechinar o apretar los dientes genera microtraumas que contribuyen a la pérdida de encía.
Personas con encías naturalmente finas tienen mayor riesgo de retracción.
Con la edad, las encías tienden a retraerse de forma gradual.
El roce constante de un piercing en labio o lengua puede dañar el tejido gingival.
El diagnóstico temprano es clave: cuanto antes se detecte la retracción, más sencillo será tratarla.
Cuando la causa es enfermedad de las encías, el primer paso es una limpieza profesional (raspado y alisado radicular) para eliminar bacterias y reducir la inflamación.
Son técnicas de cirugía plástica periodontal con muy buen pronóstico en manos de un periodoncista.
Cuando la retracción se debe a dientes malposicionados, la ortodoncia ayuda a reposicionarlos y mejorar el soporte gingival.
En pacientes con bruxismo, las férulas nocturnas reducen la presión y evitan mayor daño.
En casos de periodontitis avanzada, pueden aplicarse biomateriales para estimular la regeneración ósea y gingival.
| Tratamiento | Indicaciones | Duración | Precio aprox. | Efectividad |
|---|---|---|---|---|
| Limpieza periodontal profunda | Gingivitis o periodontitis leve | 1–2 sesiones | 80–200 € | Controla inflamación, no regenera encía |
| Injerto libre de encía | Retracciones moderadas a severas | 1 cirugía | 400–900 €/zona | Alta, estética limitada |
| Injerto de tejido conectivo | Retracción estética en dientes frontales | 1 cirugía | 600–1.200 €/zona | Muy alta y natural |
| Colgajo desplazado coronal | Retracción leve a moderada | 1 cirugía | 300–700 €/zona | Muy buena |
| Ortodoncia invisible | Retracciones por malposición dental | 12–24 meses | 2.500–4.500 € | Corrige la causa |
| Férula de descarga | Bruxismo | Uso nocturno | 150–300 € | Previene mayor retracción |
La mejor solución siempre será la prevención:
No. Una vez perdida la encía, no vuelve por sí misma. Solo con cirugía o injertos puede recuperarse.
Se realiza con anestesia local. Puede haber molestias leves en el paladar y zona tratada, controlables con analgésicos.
Entre 1 y 2 semanas para la curación inicial, aunque la integración completa tarda varias semanas.
Aumenta la sensibilidad, el riesgo de caries y puede llegar a comprometer la estabilidad del diente.
Sí, con una técnica de cepillado correcta, higiene adecuada y revisiones periódicas.
Las encías retraídas son un problema frecuente que puede comprometer tanto la estética como la salud dental. Aunque no se regeneran solas, existen tratamientos eficaces y seguros —desde limpiezas hasta injertos de encía— que permiten recuperar la sonrisa y prevenir complicaciones.
La clave está en el diagnóstico temprano y en acudir a un periodoncista para elegir la solución más adecuada según cada caso.
Cuidar tus encías no solo protege tu sonrisa, también asegura la salud de tus dientes a largo plazo.
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Las encías son tejidos fundamentales para la salud bucal que a menudo no reciben la atención que merecen hasta que aparecen problemas. Estas estructuras rosadas que rodean nuestros dientes desempeñan funciones vitales: protegen las raíces dentales, forman una barrera contra las bacterias y mantienen los dientes firmemente anclados en su posición. Comprender su anatomía, importancia y necesidades específicas de cuidado es esencial para prevenir enfermedades periodontales y mantener una sonrisa saludable durante toda la vida.
El curetaje dental o raspado y alisado radicular es un tratamiento periodontal fundamental cuyo costo puede variar según la extensión del área a tratar y la severidad de la enfermedad periodontal. En 2025, los precios se establecen generalmente por cuadrantes (dividiendo la boca en cuatro secciones), lo que permite un tratamiento más específico y un presupuesto más ajustado a las necesidades reales del paciente. Factores como la profundidad de las bolsas periodontales, la necesidad de anestesia local, el número de sesiones requeridas y la ubicación de la clínica influyen directamente en el costo final del tratamiento.
