El dolor de encías puede deberse a gingivitis, infecciones, aftas o prótesis. Descubre sus principales causas y las mejores soluciones para eliminarlo.
El dolor de encías es un síntoma muy frecuente que puede ir desde una simple molestia temporal hasta el aviso de una enfermedad bucal más seria. Muchas personas lo relacionan con un cepillado fuerte o un diente sensible, pero la realidad es que puede estar asociado a gingivitis, infecciones, aftas o problemas con prótesis y ortodoncia.
Saber cuáles son las causas del dolor de encías y cómo tratarlo a tiempo es fundamental para evitar complicaciones como la periodontitis o la pérdida de piezas dentales.
En esta guía encontrarás todo lo que necesitas: causas más comunes, síntomas, tratamientos profesionales, remedios caseros y consejos de prevención.
El dolor gingival puede tener múltiples orígenes:
El sarro endurecido irrita las encías, generando inflamación, dolor y sangrado.
Usar demasiada fuerza o cepillos de cerdas duras puede dañar el tejido gingival, provocando dolor y retracción.
Pequeñas úlceras dolorosas que aparecen en la mucosa de la boca y pueden afectar a las encías.
Un diente infectado puede irradiar dolor hacia las encías, acompañado de inflamación localizada.
Durante embarazo, adolescencia o menopausia, las encías pueden volverse más sensibles e inflamarse con facilidad.
La falta de vitamina C puede causar sangrado y dolor de encías (escorbuto en casos graves).
La carencia de vitaminas del grupo B favorece la aparición de aftas dolorosas.
Un raspado y alisado radicular elimina placa y sarro debajo de la encía, reduciendo inflamación y dolor.
En gingivitis avanzada o periodontitis, se requieren terapias periodontales o incluso cirugía para regenerar tejidos.
Si el dolor proviene de un roce con ortodoncia, prótesis o retenedores, el odontólogo puede realizar ajustes.
| Causa del dolor | Síntomas asociados | Tratamiento recomendado |
|---|---|---|
| Gingivitis/periodontitis | Encías rojas, inflamadas, sangrado | Limpieza profesional, tratamiento periodontal |
| Placa y sarro | Encías sensibles, dolor al cepillarse | Raspado y alisado radicular |
| Cepillado agresivo | Encías retraídas, dolor localizado | Cepillo suave, técnica correcta |
| Aftas bucales | Úlceras dolorosas en encía | Gel específico, enjuagues calmantes |
| Infección/absceso | Dolor agudo, hinchazón, posible pus | Antibióticos, drenaje, endodoncia o extracción |
| Cambios hormonales | Inflamación y sangrado | Higiene reforzada, control con dentista |
| Déficit vitamínico | Encías frágiles, sangrado | Suplementación, dieta equilibrada |
| Prótesis/ortodoncia | Dolor por roce, irritación | Ajuste profesional |
Importante: los remedios caseros son solo apoyo, nunca sustituyen el tratamiento odontológico profesional.
✅ Cepillarse 2–3 veces al día con técnica suave.
✅ Usar hilo dental o cepillos interdentales.
✅ Acudir al dentista cada 6 meses.
✅ Evitar tabaco y exceso de alcohol.
✅ Mantener controladas enfermedades sistémicas como la diabetes.
Si el dolor dura más de 3–4 días, sangras al cepillarte o notas inflamación persistente, acude al dentista.
No, también puede deberse a aftas, prótesis mal ajustadas o infecciones dentales.
Usar cera ortodóntica, enjuagues calmantes y consultar al ortodoncista para ajustes.
Puede evolucionar a periodontitis, comprometiendo hueso y dientes.
No. Solo alivian de forma temporal. El tratamiento profesional es imprescindible en la mayoría de los casos.
El dolor de encías es un aviso que no debe ignorarse. Puede estar causado por algo simple, como un cepillado fuerte, o ser la señal de un problema mayor, como la periodontitis.
La buena noticia es que existen tratamientos eficaces para eliminar el dolor y recuperar la salud gingival: desde limpiezas profesionales hasta geles para aftas o ajustes de prótesis.
La clave está en la prevención y el diagnóstico temprano: una correcta higiene oral y revisiones regulares con el dentista te ayudarán a mantener encías sanas y sin dolor.
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Las encías son tejidos fundamentales para la salud bucal que a menudo no reciben la atención que merecen hasta que aparecen problemas. Estas estructuras rosadas que rodean nuestros dientes desempeñan funciones vitales: protegen las raíces dentales, forman una barrera contra las bacterias y mantienen los dientes firmemente anclados en su posición. Comprender su anatomía, importancia y necesidades específicas de cuidado es esencial para prevenir enfermedades periodontales y mantener una sonrisa saludable durante toda la vida.
El curetaje dental o raspado y alisado radicular es un tratamiento periodontal fundamental cuyo costo puede variar según la extensión del área a tratar y la severidad de la enfermedad periodontal. En 2025, los precios se establecen generalmente por cuadrantes (dividiendo la boca en cuatro secciones), lo que permite un tratamiento más específico y un presupuesto más ajustado a las necesidades reales del paciente. Factores como la profundidad de las bolsas periodontales, la necesidad de anestesia local, el número de sesiones requeridas y la ubicación de la clínica influyen directamente en el costo final del tratamiento.
