Beneficios de un Smile Makeover: Mucho más que estética

¿Cuánto puede cambiar tu vida una nueva sonrisa? Seguramente has pensado en lo bien que te verías con dientes perfectos, alineados y blancos… Pero los beneficios de un Smile Makeover van mucho más allá de lo estético. En este artículo quiero compartirte, desde mi experiencia en la clínica, todas las ventajas que obtienen nuestros pacientes tras un cambio de sonrisa. Hablaremos de beneficios psicológicos, sociales, profesionales e incluso de salud oral. Si estás valorando mejorar tu sonrisa, debes saber que la recompensa no es solo verte bien en fotos – es sentirte bien por dentro y por fuera. ¡Vamos a descubrir por qué un Smile Makeover es una de las mejores inversiones en tu bienestar!

Aumento de la confianza y la autoestima

Este es, sin duda, el beneficio más inmediato y transformador. Muchos pacientes llegan cohibidos, evitando sonreír abiertamente por vergüenza a sus dientes. Tras el Smile Makeover, experimentan un salto enorme en su confianza personal.

¿Por qué ocurre? Porque la sonrisa es una parte crucial de nuestra imagen. Si antes te acomplejaba sonreír (por dientes torcidos, amarillos, etc.), probablemente desarrollaste conductas como taparte la boca al reír, reír con labios cerrados, o incluso reír menos para no exhibir los dientes. Esto a la larga afecta cómo te percibes: te cohibe. Al tener una sonrisa que te enorgullece, esas barreras desaparecen. Te descubres sonriendo abiertamente, sin temor, y eso empodera tu autoestima.

He visto pacientes que literalmente cambian su lenguaje corporal: espalda más recta, cabeza en alto, dispuestos a llamar la atención con su sonrisa en lugar de esconderse. Y es lógico: cuando sabes que tu sonrisa luce bien, la muestras con gusto. Incluso estudios psicológicos indican que sonreír frecuentemente mejora el estado de ánimo y la autoconfianza – es un círculo virtuoso.

Ejemplo real: Recuerdo a Ana, una paciente que tenía sus incisivos separados y manchados. Era muy tímida al sonreír. Tras cerrarle el diastema con carillas y blanquear su dentadura, volvió a la revisión a los 6 meses irreconocible: radiante, riendo a carcajadas. Me contó que en su trabajo ahora tomaba la iniciativa en reuniones porque “ya no me apuro por mi sonrisa”. Esa nueva seguridad la llevó incluso a pedir un ascenso que antes no se atrevía. Todo comenzó con sentirse bien con sus dientes.

Uno de los mayores beneficios intangible es que te reconcilias con tu sonrisa y contigo mismo. Recuperas o desarrollas esa autoestima que quizá tenías dormida. Y la gente a tu alrededor también lo nota; te perciben más seguro y alegre.

Mejor primera impresión y ventajas sociales

Vivimos en sociedad y, nos guste o no, la apariencia influye en las primeras impresiones. Una sonrisa cuidada genera al instante una percepción positiva. Varias encuestas señalan que una sonrisa atractiva es lo primero que notan muchas personas al conocer a alguien.

Beneficio social: Tras un Smile Makeover, es común que nuestros pacientes reciban cumplidos: “Qué sonrisa tan bonita tienes”, “Te ves rejuvenecido, ¿te hiciste algo?”. La sonrisa es contagiosa: si sonríes con confianza, invitas a los demás a acercarse. En contextos sociales – reuniones, eventos, citas – lucir una sonrisa sana puede hacerte parecer más amigable, cercano y confiable. Alguien que antes estaba retraído al sonreír puede volverse el “alma de la fiesta” simplemente porque ahora sonríe sin complejos y eso cae bien.

Beneficio profesional: En entornos laborales, una sonrisa agradable puede jugar a tu favor. No es determinante de tus habilidades, claro está, pero sí influye en la impresión que causas. Por ejemplo, en una entrevista de trabajo, sonreír demuestra seguridad y actitud positiva. Si tenías inseguridad por tus dientes y evitabas sonreír, quizás parecías serio o nervioso. Ahora con tu smile makeover, mostrarás una actitud más abierta. Estudios del mundo empresarial sugieren que quienes sonríen con confianza son percibidos como más competentes y confiables en roles de atención al cliente o liderazgo. Incluso puede influir en ventas: si eres vendedor o cara visible de una empresa, una buena sonrisa genera empatía en el cliente.

Historias que inspiran: Un paciente nuestro, Jorge, trabajaba en ventas inmobiliarias. Siempre fue bueno, pero confesaba que se cohibía en sonreír porque tenía dientes desgastados y grisáceos. Tras mejorar su sonrisa (blanqueamiento y coronas estéticas), notó que sus clientes confiaban más en él: “Ahora sonrío al saludarlos y siento que entran en confianza más rápido”, nos dijo. Sus ventas subieron ese trimestre. ¿Milagro? No, simplemente él estaba más seguro y proyectaba esa seguridad; su nueva sonrisa era parte de ese cambio.

También en la vida amorosa puede haber impacto. Sentirte atractivo al sonreír te anima a socializar más y eso aumenta posibilidades de conectar con alguien. No es que la sonrisa arregle todo mágicamente, pero es un plus.

Conclusión de este beneficio: Mejorar tu sonrisa mejora tu proyección social. Las personas responden mejor a una sonrisa auténtica y cuidada. Tú te sientes más inclinado a sonreír, lo que rompe el hielo en muchas situaciones. En definitiva, un Smile Makeover puede ayudarte a tener una vida social más activa y satisfactoria, y a dar una impresión profesional más positiva.

Apariencia más joven y atractiva

No es exagerado decir que un Smile Makeover puede ser un verdadero “anti-aging”. Los dientes, con los años, se van desgastando, amarilleando y moviendo ligeramente. Eso contribuye a una apariencia de envejecimiento. Al revertir esos cambios, inmediatamente ganas un aire más juvenil.

Dientes blancos = aspecto juvenil: Los dientes blancos se asocian con juventud y vitalidad. Con el tiempo, incluso con buena higiene, los dientes se van oscureciendo. Un blanqueamiento te puede quitar años de encima. De hecho, un estudio de Oral-B encontró que unos dientes más blancos pueden hacerte ver hasta 5 años más joven. Además, un tono uniforme y claro de dentadura desvía la atención de arruguitas o imperfecciones faciales; la mirada de los demás irá a tu brillante sonrisa.

Dientes alineados = rostro equilibrado: Cuando corregimos malposiciones o reponemos dientes faltantes, la estructura facial también mejora. Por ejemplo, al reemplazar muelas perdidas con implantes, das soporte a las mejillas que quizás estaban un poco hundidas, logrando un rostro más lleno (y por ende más juvenil). Al alinear los dientes y tener una mordida correcta, incluso los labios reposan mejor y la sonrisa se ve más simétrica. Todo esto suma a un aspecto más atractivo en general.

Rejuvenecimiento sin cirugía: Muchas personas buscan bótox o rellenos para verse más jóvenes, lo cual está bien. Pero a veces olvidan los dientes. Un Smile Makeover puede lograr un efecto rejuvenecedor notable sin una intervención quirúrgica estética. Los pacientes a menudo nos dicen: “siento que me quitaste años de encima”. Y es cierto: dientes blancos y bien formados aportan frescura al rostro. Imagínate alguien con dientes muy desgastados por bruxismo – eso les daba un aspecto de “persona mayor” porque la cara colapsa un poco. Al poner coronas que devuelven la dimensión vertical, de pronto el tercio inferior de la cara recupera altura, las arrugas peribucales se suavizan y el paciente parece más joven. ¡Es casi un lifting dental!

Atractivo y simetría: La estética dental influye en la percepción de belleza. La simetría y proporción en los dientes se asocian con atractivo. Unas sonrisas antes y después lo evidencian: en el “antes”, los dientes chuecos o manchados pueden restar armonía al rostro; en el “después”, la sonrisa alineada y luminosa complementa tus rasgos. No es superficial decir que te verás más atractivo, porque la sonrisa es de los rasgos más valorados en la belleza. Tanto hombres como mujeres con sonrisas cuidadas suelen ser puntuados más altos en fotos de evaluación de atractivo.

Ejemplo: Piensa en celebridades que han mejorado su sonrisa – Tom Cruise, por ejemplo, se arregló los dientes en su momento y su imagen cambió a mucho más pulida y joven. O nuestros propios pacientes que a los 50 se hacen carillas: de pronto sus amigos les dicen “¿qué te hiciste? Te veo más guapo/guapa” sin identificar que fueron los dientes. Es un efecto real.

Resumiendo, un Smile Makeover te da un aspecto rejuvenecido y atractivo de forma natural. Tus rasgos faciales se ven favorecidos por una sonrisa armónica. Es como si sacáramos una versión “mejorada” de ti mismo, pero sigues siendo tú, solo que con tu mejor sonrisa posible.

Mejora en la salud oral y función dental

Aunque hablemos de smile makeover como algo estético, no podemos desligar la estética de la salud oral. De hecho, muchos de los procedimientos estéticos traen implícitos beneficios para la salud y función de tu boca:

• Dientes alineados = dientes más sanos: Al corregir apiñamiento con ortodoncia o con carillas, conseguimos que tus dientes estén mejor posicionados. Esto facilita la higiene, ya que eliminamos recovecos difíciles de limpiar donde se acumulaba placa. Unas arcadas bien alineadas reducen el riesgo de caries e inflamación de encías entre dientes malposicionados. Además, una mordida equilibrada reparte las fuerzas de masticación uniformemente, evitando sobrecarga en piezas individuales (que podría causar fracturas o dolor articular).
• Reposición de dientes faltantes: Si en tu smile makeover reponemos piezas ausentes con implantes o puentes, estás recuperando la función masticatoria completa. Podrás masticar mejor los alimentos, lo que mejora tu digestión y nutrición (dientes = primer paso de digestión). También previenes problemas: un diente que falta hacía que los de al lado se desplazaran y el de arriba crezca de más; al poner implante, mantienes la alineación y evitas maloclusiones o sobrecargas en otros dientes. Y por supuesto, proteges el hueso alveolar – el implante estimula el hueso para que no se reabsorba, manteniendo la estructura facial (beneficio estético y de salud).
• Empastes/coronas nuevas reemplazan restauraciones defectuosas: Muchas sonrisas “feas” tienen también restauraciones viejas en mal estado. Al hacer tu makeover, quizás cambiamos esos empastes filtrados por otros nuevos, o coronas con bordes abiertos por coronas ajustadas. Esto elimina caries residuales o incipientes que pudieran haberse colado bajo lo viejo, y sella correctamente, evitando sensibilidad o infecciones futuras. O sea, sales no solo con algo bonito, sino con dientes reparados correctamente.
• Encías más saludables: Varios procedimientos benefician a las encías. El contorneado gingival elimina bolsas de encía sobrante donde se acumulaba placa. Un nuevo contorno facilita la limpieza con cepillo e hilo. Además, al motivarte con tu nueva sonrisa, muchos pacientes mejoran sus hábitos de higiene – ¡no querrás arruinar esa obra de arte! Hemos visto gente que tras sus carillas se vuelve más disciplinada con el hilo dental por miedo a mancharlas o que les dé gingivitis. Así que indirectamente, un smile makeover te anima a mantener mejor tus encías. Y encías sanas = menor riesgo de periodontitis y pérdida dental a largo plazo.
• Corrección de hábitos nocivos: En el proceso, solemos abordar problemas como bruxismo (apretamiento). Si te detectamos desgaste, te hacemos placa de descarga. Eso previene más daño a tus dientes (beneficio de salud) y protege tus nuevas restauraciones. También aconsejamos sobre dieta no cariogénica, cuidado de alimentos pigmentantes, etc. Muchos pacientes dejan de fumar tras un makeover porque no quieren manchar sus dientes nuevos – ¡gran beneficio para la salud general también!.
• Función mejorada = comodidad: Una mordida bien ajustada tras coronas o carillas hace que mastiques sin molestias. Si tenías algún diente roto que evitabas al masticar, al arreglarlo recuperas esa función. Algunos pacientes con dolores de mandíbula por mordida desequilibrada mejoran al rehabilitar correctamente su boca (ya que armonizamos las guías de mordida). No estoy diciendo que un smile makeover cure problemas de ATM graves, pero en ocasiones, al restaurar la dimensión vertical (p. ej. con coronas en desgastados) se alivia tensión muscular. Masticar eficientemente también puede ayudarte a digerir mejor y evitar molestias digestivas por no triturar bien la comida.
• Detección temprana de problemas: Al planificar un smile makeover, hacemos estudios completos: radiografías, fotos, etc. Muchas veces descubrimos caries ocultas, quistes, fracturas, inicio de enfermedad periodontal… cosas que quizás no sabías. Aprovechamos y las tratamos antes o durante el makeover. Así que te llevas no solo estética sino una boca más saludable integralmente.

En síntesis, un smile makeover bien llevado no compromete la salud, al contrario, la mejora o la restaura. Estética y salud van de la mano: para lograr un buen resultado estético debemos asegurar la salud (no pondremos carillas sobre caries, ni ignoraremos encías enfermas), y el resultado estético a su vez favorece la salud futura (por mejor higiene, función, etc.). Es un ganar-ganar. Sales con una sonrisa bonita y una boca más sana y funcional.

Impacto emocional y calidad de vida

Este apartado es más intangible, pero igual de importante. Una vez completado tu Smile Makeover, notarás cambios sutiles pero profundos en tu día a día:

• Mayor felicidad diaria: Suena exagerado, pero es real: al gustarte tu sonrisa, sonríes más a menudo. Y sonreír libera endorfinas, las hormonas de la felicidad. Incluso cuando no hay un chiste de por medio, el simple acto de verte al espejo sonriendo sin complejos te alegra. Muchos pacientes nos dicen que pasan días sonriendo frente al espejo como tontos, asimilando el cambio. Esa felicidad se irradia a tu estado general de ánimo. Puede mejorar tu relación contigo mismo y con otros – estás más positivo, y eso genera reacciones positivas de vuelta.
• Adiós a complejos y ansiedad social: Si antes tenías ansiedad al pensar “Uy, en esa reunión de antiguos alumnos se fijarán en mis dientes feos” o “No quiero salir en esta videollamada porque me da corte mi sonrisa”, todo eso desaparece. Te quitas un peso mental enorme. Ya no gastas energía preocupándote por ocultar tu defecto. Esa liberación te permite ser más espontáneo y estar presente en el momento, en lugar de en tu cabeza pensando en tu apariencia. En psicología, eliminar un complejo puede incluso disminuir niveles de estrés y mejorar autopercepción corporal.
• Mejora en fotografías y recuerdos: Quizás parezca menor, pero a nivel emocional es bonito. Ahora te encantará salir en las fotos – sonreirás ampliamente en bodas, vacaciones, selfies. Cuando veas esas fotos en el futuro, no sentirás vergüenza sino orgullo. Tendrás álbumes llenos de sonrisas genuinas. Eso influye en tu narrativa personal: ya no eres “el/ la que no sonreía en fotos”, sino alguien que disfruta el momento sin inhibiciones. Cuando envejezcas y veas tus fotos de la época post-makeover, te verás feliz y radiante, y eso es un recuerdo valioso.
• Impulso a otras mejoras saludables: Curiosamente, arreglarte la sonrisa puede ser el primer paso para un cuidado personal integral. Al verte tan bien, quizás decidas empezar a hacer ejercicio, o mejorar tu forma de vestir, o comer más sano para mantener tu nueva imagen. No porque la estética lo sea todo, sino porque te sientes motivado a ser tu mejor versión. He tenido pacientes que tras su nueva sonrisa se inscribieron al gimnasio porque decían “ya di el primer paso de cuidarme, quiero seguir”. Uno inclusive dejó de fumar (lo cual mencioné antes, por temor a manchar dientes, pero el efecto es una vida más sana). Ese boost de autoestima te puede llevar a más hábitos positivos.
• Satisfacción personal: Hay algo muy gratificante en cumplir una meta personal. Si mejorar tu sonrisa era un deseo postergado, cuando al fin lo logras sientes una gran satisfacción. Es como “lo hice, lo logré”. Eso refuerza la idea de que puedes lograr lo que te propones, lo cual se traduce en más confianza para otros retos en la vida. Parece loco que unos dientes puedan hacer tanto, pero es el empoderamiento que viene de tachar un complejo de tu lista de inseguridades. Te anima a abordar otros (si es que los hay) o simplemente a disfrutar sin esa espinita constante.

Testimonio típico: Una paciente nos dijo tras ver su sonrisa final: “Siento que puedo comerme el mundo”. Esa sensación de euforia y empoderamiento es común. Después se modera, claro, uno sigue con la vida normal, pero un fondo de esa seguridad se queda contigo.

Relaciones interpersonales: Emocionalmente también te abres más a la gente. Si antes rehuías conversaciones cercanas o evitabas reírte en citas por tu inseguridad, ahora te muestras tal cual eres, sin barreras. Esto hace que las relaciones sean más auténticas. Quienes te quieren, además, se alegran de verte feliz – es contagioso. Una paciente me contó que su hijo pequeño le dijo: “Mamá, me gusta que sonrías más”. Imagínate la emoción de ella, se dio cuenta de cuánto evitaba sonreír antes incluso con su familia. Ahora ríe libremente, y eso mejora su ambiente familiar.

En conclusión, los beneficios emocionales de un Smile Makeover son profundos: libertad de ser tú mismo, felicidad al verte bien, motivación positiva, eliminación de complejos. Todo esto redunda en una mejor calidad de vida. Porque la calidad de vida no es solo salud física, sino bienestar mental, social y emocional. Si una intervención odontológica puede darte eso… ¡es mucho más poderosa de lo que parece!

Resultados duraderos que justifican la inversión

Vale la pena mencionar este punto práctico: los beneficios de un smile makeover no son efímeros, sino que duran muchos años. Esto es importante porque consolida todo lo anterior – no es una felicidad pasajera, sino un cambio sostenido.

Longevidad de la sonrisa renovada: Si cuidas tu boca, las mejoras estéticas se mantienen en el tiempo. Como explicamos en otros artículos, unas carillas de porcelana pueden durar más de una década, un implante puede ser de por vida, la ortodoncia mantenida con retenedores conserva tus dientes alineados, etc. Por tanto, los beneficios de confianza, estética, etc., los vas a disfrutar a diario por muchos años. No es como un corte de pelo que en 2 meses perdió forma; es una transformación de larga duración.

Relación costo-beneficio: Aquí entra la reflexión: un smile makeover puede costar, digamos, 5000€. Pero si te dura 10 años en buen estado, son 500€/año, ~42€ al mes. Por 42€ al mes (mucho menos de lo que cuesta un café diario), has tenido 10 años de gozar de tu sonrisa sin complejos, con todos los beneficios psicológicos y sociales mencionados. Eso la mayoría coincide en que vale totalmente la pena. Incluso, con mantenimientos, esos 10 años se pueden extender.

Menos gastos futuros en problemas dentales: Otra ventaja duradera es que, al haber restaurado tu boca, es menos probable que tengas emergencias costosas en años cercanos. Ej: si dejaste caries sin tratar por miedo antes, ya las tratamos; si faltaban dientes que podían causar desgaste en otros, ya los reponemos, etc. Siguiendo las instrucciones, tu salud oral debería ser más estable, evitando gastos inesperados por descuidos. Obviamente hay que continuar con limpiezas y revisiones (que también te ofrecemos en planes de mantenimiento), pero suele ser menor comparado a crisis dentales frecuentes.

Sentido de permanencia en la mejora personal: A nivel emocional, saber que tu nueva sonrisa se queda contigo te da un gusto continuo. No es un maquillaje que te quitas al dormir – es tu cuerpo mejorado permanentemente. Eso refuerza los beneficios día tras día. Cada mañana al cepillarte y ver tus dientes bien, te alegras de la decisión que tomaste. Es un regalo a tu “yo futuro” que sigue dándote frutos.

Efecto dominó positivo: Con el tiempo, los beneficios pueden crecer. Por ejemplo, la confianza te llevó a conseguir un mejor empleo, gracias a eso viajas más o mejoras tu estilo de vida… no digo que siempre pase así, pero son puertas que se pueden abrir a raíz de sentirte mejor contigo mismo. Conoces a alguien especial porque ya no te daba vergüenza sonreír en aquella reunión… Y así, esa decisión de mejorar tu sonrisa pudo ser un catalizador de cosas buenas en tu vida, incluso mucho después.

Tranquilidad y satisfacción sostenida: Hay también una calma mental duradera. Antes tal vez cada vez que notabas tus dientes decías “Uff, tengo pendiente arreglarlos… algún día…”. Esa tarea inconclusa ya no existe. Tienes paz en ese aspecto. Y la satisfacción personal de “lo logré” no se va pronto; cada cumplido que recibes o cada situación que afrontas con seguridad refuerza ese sentimiento.

Resumiendo este punto: los beneficios de un Smile Makeover perduran en el tiempo, haciendo que la inversión (de dinero, tiempo y decisión) sea altamente rentable en términos de felicidad y calidad de vida. Es un cambio que disfrutarás hoy, mañana y muchos años más.

Conclusión

Un Smile Makeover es mucho más que un tratamiento de vanidad o superficial. Como hemos visto, trae consigo beneficios integrales: te hace sentir más seguro, te ayuda a relacionarte mejor, te rejuvenece, mejora tu salud oral y te aporta felicidad duradera.

He sido testigo de transformaciones increíbles en mis pacientes, no solo en sus bocas sino en sus vidas. Personas que recuperaron la sonrisa que perdieron por años de complejos, y con ella recuperaron parte de su esencia. Ver a alguien sonreír espontáneamente después de haberse inhibido tanto es emocionante. Por eso amo ofrecer Smile Makeovers: sé que no solo cambio dientes, cambio historias personales para bien.

Si estás dudando si vale la pena, espero que estos puntos te ayuden a valorar el impacto positivo real que puede tener en ti. Pregúntate: ¿Cómo me sentiría al poder sonreír sin inseguridad? ¿Qué haría de diferente? Si tus respuestas apuntan a que serías más feliz, más libre, más tú… entonces ese es el valor que vas a obtener.

En nuestra clínica, no solo nos enfocamos en la técnica, sino en acompañarte en este cambio. Nos emociona ver tu cara al final del tratamiento, comparando las fotos del antes y el después. Y semanas luego, escuchar cómo te va con tu nueva sonrisa – esas anécdotas de “Ahora no paro de sonreír” o “Mis amigos notan algo distinto en mí (para bien)”. Eso hace que todo el esfuerzo valga la pena para nosotros también.

Te animamos a dar el paso si mejorar tu sonrisa es algo que deseas. Por ti, por tu bienestar. Piensa que es un regalo que te haces, uno que te acompañará siempre. Nosotros estaremos encantados de ser parte de ese proceso y de entregarte no solo dientes bonitos, sino la llave para que muestres al mundo tu mejor sonrisa y tu mejor actitud.

Sonreír es vivir, y con un Smile Makeover vivirás cada momento con más intensidad y alegría. ¿Listo para experimentar todos estos beneficios en carne propia? ¡Te esperamos en [Clínica SonrisaIdeal] para comenzar juntos esta transformación positiva!

Preguntas frecuentes sobre los beneficios de un Smile Makeover

¿No es algo superficial querer mejorar la sonrisa solo por apariencia?

Mejorar tu sonrisa va más allá de la vanidad. Si bien es un cambio estético, sus efectos positivos tocan tu autoestima, tus relaciones y tu salud oral. No es superficial querer verte bien; nuestra imagen influye en cómo nos sentimos. Si un aspecto de tu sonrisa te acompleja, al resolverlo experimentas una liberación emocional y un aumento de confianza muy reales. Además, un smile makeover implica sanear tu boca en el proceso. Así que no se trata solo de “verse bonito”, sino de eliminar inseguridades y mejorar tu bienestar integral. Es parecido a corregir una vista deficiente con lentes: ¿es superficial querer ver bien? No, mejora tu calidad de vida. Lo mismo aplica a la sonrisa.

Soy muy tímido, ¿realmente una sonrisa nueva me hará más sociable?

Por supuesto, tu personalidad básica seguirá siendo la misma. Pero si parte de tu timidez viene de sentirte cohibido por tu sonrisa, al quitar ese freno te resultará más fácil soltarte. Muchos pacientes introvertidos cuentan que tras su smile makeover se animan más a iniciar conversaciones o a reírse en público, porque ya no están pensando “¡Ay, que no noten mis dientes!”. En esencia, sigues siendo tú, pero sin la carga del complejo. Eso generalmente te hace más abierto y comunicativo. No es magia: no te volverás extrovertido de la noche a la mañana si no lo eres, pero sí notarás que la timidez por ese tema en concreto desaparece. Y a veces, ese cambio desencadena mayor seguridad en otras áreas sociales también.

¿Me acostumbraré rápido a mi nueva imagen? Tengo miedo de verme “raro”.

Es normal los primeros días mirarte mucho al espejo porque te ves diferente. Pero la adaptación suele ser rápida y positiva. En unos pocos días ya sentirás tu nueva sonrisa como parte de ti. Piensa que el cambio, aunque notable, se hace buscando naturalidad, no algo que se vea falso. Nuestros diseños de sonrisa se basan en tus facciones y personalidad, para que te veas mejor pero sin perder tu esencia. Así que quizá te sientas “raro” solo las primeras horas o día, más que nada ¡raro de felicidad! – muchos dicen “no puedo dejar de sonreír, se me hace raro verme con dientes tan bonitos”. Pero pronto esa será tu normalidad. Además, las reacciones de la gente serán positivas, lo que te reafirmará. En resumen, te acostumbrarás rápido y para bien.